En relación al artículo de Bruce H. Lipton: “Un cuerpo humano es una placa de cultivo “cubierta de piel”, que contiene alrededor de 50 billones de células que crecen en el medio de cultivo original, nuestra sangre. Relevancia: No importa si una célula se cultiva en una placa de cultivo de plástico o en una placa de cultivo cubierta con piel, la actividad genética y el comportamiento están controlados por la química del medio de cultivo del laboratorio o la sangre del cuerpo. ¡Ajá! La idea final es que la química de la sangre está controlada por el cerebro que actúa como un procesador de información que traduce las imágenes de la mente en una química complementaria que regula los genes en la sangre. Las hormonas, los neuropéptidos, los factores de crecimiento y las moléculas de la emoción representan factores transmitidos por la sangre que controlan los genes y el comportamiento. Gran conclusión. La ventaja es que la Epigenética revela que no somos víctimas sino dueños de nuestra genética.